El Test de APGAR Neonatal es un examen que se realiza al recién nacido en los primeros minutos de vida para valorar su estado de salud y su adaptación al medio extrauterino. El test se basa en la evaluación de cinco parámetros que reflejan el funcionamiento de los sistemas respiratorio, cardiovascular y neurológico del bebé. Estos parámetros son:

• Frecuencia cardíaca: mide el número de latidos del corazón por minuto.
• Esfuerzo respiratorio: mide la capacidad del bebé para respirar y oxigenarse.
• Tono muscular: mide la fuerza y el movimiento de los músculos del bebé.
• Respuesta a estímulos: mide la reacción del bebé ante un estímulo doloroso o verbal.
• Color de la piel: mide la circulación sanguínea y la oxigenación del bebé.

El test se aplica al minuto y a los cinco minutos de nacer, y se asigna una puntuación de 0, 1 o 2 a cada parámetro según el grado de normalidad o anormalidad que presenten. La suma de las puntuaciones de los cinco parámetros da el resultado del test, que puede variar entre 0 y 10. Se considera que hay cuatro niveles de adaptación según el resultado del test:

• Adaptación excelente (8-10 puntos): el bebé está en buenas condiciones y no necesita ninguna intervención.
• Adaptación buena (7 puntos): el bebé está en condiciones aceptables y solo necesita cuidados básicos.
• Adaptación regular (4-6 puntos): el bebé está en condiciones deficientes y necesita estímulos y asistencia respiratoria.
• Adaptación deficiente (0-3 puntos): el bebé está en condiciones críticas y necesita reanimación y tratamiento urgente.

El test de APGAR Neonatal fue creado por la anestesióloga estadounidense Virginia Apgar en 1952, y es uno de los exámenes más utilizados y estandarizados en la atención al recién nacido. El test sirve para identificar a los bebés que necesitan ayuda para respirar o para mantener el ritmo cardíaco, y para monitorizar la evolución y el pronóstico de los mismos.

A continuación se muestra la tabla con los parámetros, las puntuaciones y las descripciones del test de APGAR Neonatal: